lunes, 13 de noviembre de 2017

RESEÑA (by MH) ::: FLORES PARA LA SEÑORA HARRIS - Paul Gallico



Título original: Flowers for Mrs Harris
Autor: Paul Gallico
Editorial: Alba (colección Rara Avis)
Traducción: Ismael Attrache Sánchez
Páginas: 166
Fecha de publicación original: 1958
Fecha esta edición: noviembre 2015
Encuadernación: rústica con solapas
Precio: 16 euros
Ilustración de cubierta: Molesko Studio

La señora Harris, una viuda de cierta edad que se dedica a limpiar casas de la clase alta londinense, descubre un buen día, en el armario de una de sus más ricas clientas, un par de vestidos de Dior que la dejan cautivada. Contra todo pronóstico, decide que ella quiere −necesita− uno de esos vestidos, aunque nunca vaya a tener ocasión de llevarlo. Cuando se entera del precio, en lugar de venirse abajo, empieza a ahorrar para conseguir su objetivo e inicia así un largo proyecto que, al cabo de dos años, acabará llevándola a París. 
«Este libro está dedicado con cariño a las valientes e indispensables señoras de la limpieza que año tras año adecentan las Islas Británicas.»

Sin más dilaciones, y para no eternizarme con una de mis, redundando, eternas entradillas, resumo: hoy toca cuquilibro :)

La colección Rara Avis, de la editorial Alba, nos da muchas alegrías y, lo que es mejor, en multitud de géneros, porque es una colección donde cabe un poco de todo. Y hoy toca un libro cuqui. Y muy british. British hasta la médula. ¿Qué más se puede pedir en esta vida? Pues una dedicatoria como esta del autor, que ya te pone la sonrisa nada más abrir el libro:
Este libro está dedicado a las galantes e indispensables señoras de la limpieza que, año tras año, ponen orden en las Islas Británicas.
Porque eso es Flores para la señora Harris, una oda a las señoras de la limpieza británicas. En esta historia todo el mundo las reconoce, todo el mundo percibe lo que son, como si fuesen una estatua de la reina Victoria o el osito Paddington. Son, SON, las mujeres de la limpieza británicas. Y no necesitan de cabinas de teléfonos donde cambiarse para convertirse en Superwoman: lo llevan de serie, se ve a la legua, se las reconoce nada más verlas. No se dejan impresionar por nada ni por nadie, son decididas, luchadoras, valientes, indómitas, independientes, fuertes y, como algo se les meta entre ceja y ceja, todas las agallas de este mundo son pocas para las que ellas despliegan en su afán por conseguirlo. Así es nuestra protagonista, viuda desde muy joven y que no se ha dejado amedrentar ni un poquito por la situación. Ha salido adelante, se ha buscado la vida, es más que feliz con lo que tiene, posee un carácter de aúpa, y además le encanta verse rodeada de belleza y color.

¿Y qué se le antoja a Ada Harris, señora de la limpieza británica y habitante de Londres? Un vestido de Dior. Pero nada de comprarlo en la boutique de la esquina... no, ella quiere comprarlo donde lo compran las damas de la alta sociedad, en el lugar sacrosanto de la firma allá en París. El vestido y el viaje cuestan su salario anual, pero también hay que vivir, así que con todo lo que hay que descontar, la cosa se puede ir a dos o tres años mínimo para poder ahorrar lo necesario. ¿Creéis que eso echa para atrás a nuestra maravillosa Ada Harris? ¡Nononono! Sin atajos, a base de trabajo, sudor y sacrificio personal, se dispone a hacer realidad su sueño. 

Si os digo que consigue llegar hasta París no os desvelo nada, porque se dice en la primera página del libro. ¿Alguien lo había dudado con lo dicho hasta ahora? ¡Claro que llega a París! ¡Claro que sube al primer piso, el de los pases privados de Christian Dior, en la Avenue Montaigne! ¡Con su abrigo desgastado, sus guantes mal escogidos, su bolso de imitación de piel y su ridículo sombrero! Y creedme, no está dispuesta a recibir un no por respuesta por culpa de su aspecto plebeyo y de clase obrera. Lleva un fajo de billetes en el bolso que quita el hipo y quiere comprar un vestido. Y además tiene que volver a su trabajo en Londres al día siguiente y ni siquiera va a hacer noche en la deslumbrante París, así que ya pueden ponerse las pilas los de Dior... porque no, Julia Roberts no fue la primera en sufrir en carnes propias el rechazo de las dependientas estiradas en las firmas de alta costura :)

Lo que pasa a continuación, las aventuras de Ada Harris en París, tendréis que averiguarlo por vosotros mismos, pero os digo desde ya que como os pongáis a ello, vais a caer rendidos ante esta humilde e inolvidable mujer que tiene ansias de belleza y elegancia, pero que ganará cosas mucho más preciosas por el camino. La señora Harris cree que si tiene un vestido tan bonito que cuesta 450 libras ya no puede desear nada más en esta vida, y el avanzar de las páginas le demostrará lo equivocada que está.

Porque lo que importa no es si en París cumple o no su sueño, si consigue o no su ansiado vestido de Christian Dior, sino el proceso para conseguirlo, la determinación, la ilusión, la aventura, los descalabros, los tropiezos, los sacrificios... y las personas que se encuentra por el camino, personas que necesitan como agua de mayo un hada madrina en forma de señora de la limpieza británica  que dé un poco de luz y calor a sus vidas.

Flores para la señora Harris comienza siendo la historia de amor de la señora Harris por un vestido de Dior, y termina siendo una oda al amor por la vida, a no dejar jamás de intentar cumplir nuestros sueños, a no permitir que nuestro lugar en el mundo defina quiénes somos y a lo que aspiramos. Te deja con una sonrisa en la cara, con un poso de alegría, de confianza en la existencia de la bondad humana, y aunque un pepito grillo te dice que en la vida real seguramente las cosas hubiesen sido muy distintas, para eso están los libros: para soñar. Y la lección está ahí: el amor, la amistad, la humanidad, la bondad, la empatía, una sonrisa cuando todo parece ir mal... todo ello debe prevalecer siempre sobre lo material. 

Dos tercios de la historia transcurren en París, y mientras que en el tercio restante somos testigos el carácter admirable de nuestra protagonista en su tesón por conseguir los cientos de libras que le hacen falta, en esas otras páginas, las que tienen lugar cuando pisa la Ciudad de la Luz, es donde la magia de la historia se despliega ante nuestros ojos. Personajes memorables, de los que quizás al cabo de las semanas no recuerdas sus nombres pero sí cada uno de sus actos y efectos en la historia; diálogos exquisitos e inteligentes, de esos que nacen de una visión acerada e ingeniosa del mundo y sus habitantes; y sobre todo el poso, ese sedimento risueño, optimista y pleno de fe en la raza humana y en su bondad que no te suelta cuando cierras el libro.

Estamos en el mes feelgood, y eso es lo que representa este libro, pero no caigáis en la tentación de creer que no hay nada más allá de eso. La moraleja intrínseca a la historia, lejos de resultar moralizante, destila sentido común, genialidad y amor en el sentido más amplio de la palabra. Y si os preguntáis qué tiene que ver el título con el dichoso vestido de Dior... pues tendréis que leer también el libro para descubrirlo. Porque lo es todo: ese título lo resume todo.

Por cierto, ¿recordáis la peli aquella de La aventura del Poseidón? ¿Esa de catástrofes en la que un trasatlántico queda boca abajo, y sálvese quien pueda, y todas esas cosas? Pues la novela en que se basaba era de este mismo autor, Paul Gallico, y salvo alguna edición viejuna de esta novela, poca cosa suya más hay en castellano. Y encima resulta que nuestra querida señora Harris protagonizó al menos tres novelas más: en una de ellas se largaba a Nueva York y en otra plantaba sus feos zapatos en Moscú. Sé que tengo la boca muy grande y las manos muy ligeras para pedir a todas horas que traduzcan cosas inéditas en castellano, pero, ¿de verdad nos vamos a quedar a medias con las aventuras de Ada? Ya son ganas de hacernos sufrir, oye...

De ascendencia italiana y austriaca, Paul Gallico nació en Nueva York en 1897. Se licenció por la Universidad de Columbia y empezó a trabajar como periodista deportivo para The New York Daily News. A finales de la década de 1930, decidió abandonar el periodismo deportivo y empezó a escribir relatos breves para varias revistas. Una de sus novelas infantiles más conocidas, El ganso de nieve (1941), así como algunas otras, tuvieron su origen en esos relatos cortos. Otros títulos que le hicieron célebre fueron The Adventures of Hiram Holliday (1939) o el relato The Man Who Hated People (1950), que se convirtió en un libro llamado Love of Seven Dolls (1954) y dio lugar a la película Lili (1953) y al musical Carnival! (1961).

Flores para la señora Harris (1958) tuvo tal éxito que, en las décadas siguientes, la seguirían tres secuelas (Mrs Harris Goes to New York en 1960, Mrs Harris, M.P. en 1965 y Mrs Harris Goes to Moscow en 1974). En 1969 publicaría La aventura del Poseidón, también conocida por su adaptación al cine en 1972. A lo largo de su extensa y prolífica carrera combinó la literatura infantil con la adulta, a veces eliminando los límites entre ambos géneros. Thomasina: The Cat Who Thought She Was God (1957) o Manxmouse (1968) son otras de sus obras infantiles más conocidas. Murió en Mónaco en 1976.

23 comentarios:

  1. Hola chicas!
    Yo solo conocía de Gallico precisamente esa del Poseidón, la leímos en clase allá por los años del Pleistoceno, y ya no había vuelto a leer nada suyo...hasta ahora. Vi el libro en otro blog y me llamó poderosamente la atención, y es que en cuanto en una historia destacan los diálogos ocurrentes me encanta.

    Un besito!!! 😘😘😘

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  2. Hola!! Ya sólo leyendo tu reseña me ha trasmitido muy buen rollo! por lo que esta novela tiene que ser una genialidad.Besos

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  3. ¡Anda, yo también digo eso de cuquilibro! Me encanta la señora Harris y Paul Gallico, cuando Laky me pidió algunos títulos para el mes del feelgood, este fue uno de los primeros que le sugerí, sobre todo porque ya sabes que suelo frecuentar el feelgood británico y a veces me olvido que hay joyitas como esta, de otros lugares. Es un cuquilibro para olvidarse del feo mundo, sobre todo un lunes como este, en el que me está matando un dolor de cabeza y el hastío de las noticias políticas. Un besote.

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  4. Ohhhhhhhhhhhhhhh yo quiero conocer a la señora Harris. Una heroína de la que seguro que aprendo mucho. Me encanta. A ver si lo pillo. Me lo llevo bien anotado. Besos

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  5. Mira que lleva tiempo este libro en mi lista de pendientes. ¡A ver cuándo me animo!
    Besotes!!!

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  6. La de novelas interesantes que me estoy perdiendo por no arriesgarme a salir de mi zona de confort. Quiero este cuquilibro en mis estantería para descubrir la relación que guarda su título con ese vestido de Dior. Besos

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  7. La verdad es que he visto este libro hace tiempo por la blogosfera y no recuerdo a quién... pero ahora que lo has vuelto a traer me lo tengo que apuntar porque es de los que me encantan...
    Un besazo

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  8. Pues ya lo sabes, coincidimos cien por cien con esta novela y encima creo que nos ha llegado el mismo mensaje, y es un mensaje muy necesario en la situación actual donde se nos ha ido la pinza con el instagram y todo lo que se supone que debemos querer, se nos olvida lo que sentimos de verdad porque nos dirigen.
    No me lo puedo creer, ¿tres historias de la señora Harris y solo tenemos una? Por favor, tenemos que llenar la inbox de Rara Avis de peticiones, no nos pueden hacer esto. Es un derecho humano poder leer esas historias.
    Besos

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  9. Había leído CUQUILIBRIO y os iba a decir, eh, que me lo llevo para mi blog. Ni caso, ¿ale?
    Tengo fichado este título desde hace un tiempo y tengo la oportunidad de cogerlo en préstamo en digital. Lo voy a subir de puntuación en la wishlit para darle candela más pronto que tarde.
    Besitos.

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  10. Ayayayaya ¿qué tendrá lo british que nos gusta tanto? No sé...me parece una lectura super divertida y que seguro me gustaría, así que tomo buena nota ;)

    Besitos

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  11. Hola, yo directamente quiero leerme todos los Rara Avis, porque son muy pocos los que decepcionan. Así que desde luego que me apunto esta lectura :)

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  12. Me encantó el libro por todo lo que simoboliza ese vestido.

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  13. Chicas uno más que me anoto, no me da la vida jaja.
    Un beso ;)

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  14. No lo conocía pero eso hay que remediarlo.¡ Qué bonito parece!
    Besos

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  15. Lo leí el año pasado y me divertí.No tenía ni idea que había dos más,me uno a tu petición de que las traduzcan.
    Un beso

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  16. Pues fíjate que yo pensaba que igual era una historia muy cuqui y demasiado british para mí, pero oiga, igual he visto yo aquí un trasfondo que no había adivinado por reseñas anteriores y que me gusta...
    Besos.

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  17. Me encanta... tengo que hacerme con él y leerlo.
    Besos

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  18. Un nuevo descubrimiento que sin duda ha captado mi interés, gracias por descubrírmelo indagaré un poco más.

    Besos =)

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  19. Me pasa como a Margari, este libro lleva tanto tiempo en mi lista de pendientes que ya lo había olvidado, estaré ojo avizor oír si me lo encuentro. Besinos.

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  20. Leí otra reseña ayer en el blog de Norah. La verdad, no me veo leyéndolo, pero no lo descarto, a Moniki puede que le guste.

    Un beso ;)

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  21. Creo que fue Inés la que el año pasado leyó esta novela y la recomendó mucho. La verdad es que como bien decís es cuqui, cuqui y si además engancha y tiene unos personajes buenos me la llevo.
    Besos

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  22. Hum...no termina de llamarme la verdad, que el consumismo y el deseo de comprar un vestido sea lo que mueva a la protagonista...No sé, creo que no podría identificarme con ella, no haría algo así por un vestido (aunque el vestido sea un excusa y sea una declaración de derechos). Además, la trama no termina de atraerme, pero me alegro que os haya gustado. Eso sí, una cosa que me ha sorprendido es que se un autor y no una autora, curioso.

    Un saludo,
    Laura.

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